lunes, 16 de diciembre de 2013

Sobrevivir a la Navidad

Adoro la Navidad. Desde siempre. Y no tengo que volver a repetiros que también adoro a mis hijos. Pero, a veces, la combinación hijos-trabajo-Navidad es mortal de necesidad. Yo no sé si a vosotr@s os pasa, pero mis hijos suelen estar bastante irascibles los primeros días de vacaciones. Tanto en verano como en Navidad. Y, claro, si lo tienes que combinar con tu trabajo y, como me pasa a mí, no tienes posibilidad de cogerte días libres en estas fiestas puedes acabar de los pelos.



Así que yo siempre intento buscar planes divertidos que hacer con ellos y que, al mismo tiempo, me permitan a mi hacer los miles de recados que siempre tengo pendientes a última hora. Como, por ejemplo, comprar sus regalos!!

jueves, 5 de diciembre de 2013

Kinder-café

Soy mamá de dos niños. De seis y cuatro años. Y sólo los que tenéis hijos seréis conscientes de lo difícil que es encontrar un sitio a cubierto donde poder tomarte un cafetito con un mínimo de tranquilidad y, siendo ya muy muy optimista, manteniendo una charla con algún adulto.

Por si fuera poco, cuando nació mi hijo mayor, estaba vigente la antigua legislación anti-tabaco, que permitía a los locales pequeños decidir si permitían o no fumar. Y, claro, la mayoría lo permitían. Con lo cual, o te metías en una de esas peceras que algunos habían habilitado para no fumadores, o ibas a uno de los escasos locales que no permitían fumar.

Cuando Antón (el mayor) era pequeño, yo "vivía" en la Tahona que había cerca de mi casa que tenía unas mesitas para tomarte algo y, claro, como vendía pan, no permitía fumar.

Cuando nació Anxo (el pequeño), mis amigas y yo descubrimos una nueva fórmula. Nueva y un poco cutre, todo sea dicho. Nos íbamos a merendar a la cafetería de Ikea, que acababa de abrir en nuestra ciudad. Los peques jugaban en la zona de juegos y nosotras nos tomábamos café patrocinado por Ikea durante la semana (por si alguien en el universo no lo sabe, si tienes la tarjeta Ikea Family te dan café gratis de lunes a viernes). Lo que decía: bastante cutrecillo. Pero lo pasábamos bien y, en mi descargo, he de decir que, para salir de allí te tenías que recorrer toda la exposición de la planta baja con lo cual, raro era el día que salíamos de allí sin "picar" algo.



Afortunadamente, las cosas cambiaron y, con la nueva legislación, todos los locales eran "aptos" para papás con niños. Y digo "aptos" porque, aunque mis hijos son bastante tranquilos (creedme, no es amor de madre. Todas mis amigan lo confirmarían sin necesidad de soborno por mi parte), al final es un rollo tener que "contener" a dos criaturitas mientras intentas tomarte un café.

Cada vez hay más locales que se han decidido a crear un rinconcito para niños: unas mesitas de Ikea, unas sillas Mamut, unos lápices de colores y diez minutos de tranquilidad para los padres. Éste es el caso de Pandelino y La Jijonenca en A Coruña.


Pero, hace muy, muy poquito, alguien tuvo una brillante idea: crear un espacio para los niños, donde el rinconcito fuera para los padres. Y eso es Dadá Kindercafé.

Un sitio con parking para sillitas, tronas, microondas y cubiertos a tu disposición para comidas y meriendas. Un sitio con un menú adaptado a los niños; para que os hagáis una idea: meriendas que incluyen sandwiches, batidos, fruta o yogures. En definitiva, un sitio para niños.

domingo, 1 de diciembre de 2013

Calendario de Adviento

En casa no somos muy religiosos; bueno, nada religiosos. Pero me encanta la Navidad. Ya sé que la mayoría de la gente no se plantea la Navidad como un sentimiento religioso sino como algo comercial, pero es que yo soy de darle vueltas a las cosas.

Evidentemente celebramos las fiestas importantes, ponemos el árbol, nos regalamos en Reyes pero no ponemos el Nacimiento. Y claro, como no hay Nacimiento, tampoco hay preguntas por parte de los niños. Eso hace que se generen situaciones como ésta:

Conversación entre Antón (6 años) y Anxo (4 años) el año pasado:

  • Anxo: ¿Éste es el niño Jesús?
  • Antón: Sí
  • Anxo: Y su mamá cómo se llama, Lorena?
  • Antón: No hombre! Se llama Belén, no ves que es el portal de Belén?



    miércoles, 27 de noviembre de 2013

    Chaleco visón

    Ante las abrumadoras peticiones de mis cientos, qué digo cientos, miles de seguidoras, por fin un tutorial de calceta. Calceta, punto o knitting, que es mucho más fino. Pero vamos que es la calceta de las abuelas de toda la vida. Que ahora se ha vuelto a poner muy de moda, en algún sitio he leído que es el nuevo yoga. Y he de darles la razón; para mí, terapia antiestrés total.

    Pero vamos al lío. Os voy a enseñar cómo hice un chaleco para mi sobrina, que es la primera fan de mis "creaciones"; bueno no sé si ella o su madre, mi hermanita. Es facilísimo y muy rápido de hacer. Y a mí me parece que el resultado no está nada mal.






    lunes, 18 de noviembre de 2013

    Casa Xanceda

    Adoro a mis amigos. Son los mejores. Hay amigos que ves a diario y hay otros a los que no ves tan frecuentemente pero que, cuando los ves, tienes la sensación de que el tiempo se ha detenido en vuestro último encuentro. Y esto me pasa con Yoli y con Bea.

    Aunque a Yoli la veo más frecuentemente, el triunvirato sólo se reúne en verano y, si hay suerte, en Navidad. Pero da igual. Cuando volvemos a encontrarnos todo funciona. Al principio eran reuniones de chicas pero, con el paso de los años y de los hijos, se han convertido en planes familiares. Así que siempre organizamos una excursión para disfrutar con los niños. Este año elegimos Casa Xanceda.



    Nosotros de Casa Xanceda conocíamos los yogures (los de vainilla son los favoritos de mis peques) pero nos enteramos de que se podía visitar la granja así que allá nos fuimos!

    Es una granja que nace en los años 60 y, desde el principio, huyen de la utilización de pesticidas y fertilizantes artificiales aunque, por supuesto, por aquel entonces pocos habían oído hablar de agricultura ecológica.

    jueves, 14 de noviembre de 2013

    Moodboard

    Soy perfeccionista. No puedo evitarlo. Eso no quiere decir que luego el resultado de lo que hago sea perfecto ni mucho menos, pero yo tengo que darle mil vueltas a todo. Un año y medio para decidirse a escribir la primera frase en mi blog es mucho tiempo. He leído libros, eh hecho cursos, sigo mil blogs...y nada, no me decidía. Hasta que llegó hello creatividad a mi vida.

    Estando de vacaciones me enteré de que se organizaba un curso para bloggers principiantes. Ésta es la mía, pensé; si hago este curso ya estaré preparada. Y me apunté. Pero el curso comenzaba en Noviembre. Demasiado tiempo. Tiempo para seguir pensando en mi blog, dándole vueltas, soñando con él...hasta que llegó el día.

    Empecé el curso y me enganché. Primero con miedo, pensaba que todos los participantes tendrían experiencia, unos blogs preciosos y que yo iba a ser la única novata. Tan novata que, aunque ya tenía diseño, no había escrito ni una línea. Pero no. Resulta que había gente con experiencia, gente sin blog y otra con miedo a empezar. Como yo.

    Así que, con estos compañeros y unas profesor geniales, yo empecé a sentirme como pez en el agua. Y entonces con el empujón del curso y el ultimátum de mi chico ( que llegó a coger mi ordenador y escribir las primeras palabras del blog) me decidí. Justo después de publicar la primera entrada llegó el desafío que nos planteaban en el curso: hacer y publicar un moodboard.

    Y, como siempre, aquí estoy a última hora (el plazo del curso termina hoy) acabando este post para enseñaros mi moodboard, que es una palabreja de esas de moda  que significa algo así como collage o tablero de ideas acerca de un tema. Y éste es el mío...



    No sólo es un collage de mi blog sino también de mi vida, que es lo que pretendo reflejar en él: mis sellos, washi-tapes, libros de calceta y costura, lanas, telas (de black oveja), mi nube, mi reloj (un Omega de más de 50 años que era de mi adorado abuelo) y, por último, aunque no menos importante, la que pretende ser mi filosofía de vida y mis chicos, que son mi vida.

    lunes, 11 de noviembre de 2013

    Bienvenidos a mi blog: en las nubes

    Hoy empiezo una nueva aventura, la de escribir un blog.

    A pesar de que sólo unas pocas personas llegarán a leerlo, siento un cierto vértigo por enfrentarme al teclado e intentar contar mis cosas al mundo fuera del entorno conocido de Facebook o Instagram, directamente sobre un soporte en blanco que es sólo mio.


    De momento aspiro a perder el miedo, volver por aquí con regularidad y hacerme con todos los botoncitos y opciones que hay en esta nueva pantalla. El objetivo final es poder compartir las cosas que me gustan con las personas a las que pueda interesar la vida de una madre-médico-costurera-repostera que ahora aspira a ser también bloguera.

    Hace cuatro años empecé a leer blogs y siempre tuve el deseo de empezar uno. Hace más de un año (sí, soy un poco lenta) me puse en serio y contraté a Blanca para hacer el diseño y, desde entonces intento reunir valor para sentarme a escribir. Y parece que ese día ha llegado (aunque he de reconocer que el principal "culpable" de que hoy esté aquí es mi chico que me ha obligado a sentarme e incluso ha escrito las primeras palabras!)

    Blogging tips