El café de los viernes y el día Fujitsu

Muy buenos días, aquí estoy un viernes más preparada para compartir un cafetito contigo. Hoy lo acompañamos con unas galletitas nube hechas en casa. Ya casi está listo, ponte cómoda que empezamos...

Si estuviésemos tomando un café, te contaría que hace unos días recibí un whattsap de una de mis amigas del  instituto. Hacía tiempo que no hablábamos pero el otro día ella estaba ordenando recuerdos de hace años y encontró su diario de adolescente y claro, se acordó de mí. Era una hora un poco rara para que ella estuviese libre así que le pregunté y me dijo que estaba de Día Fujitsu. Mi amiga que, igual que tú, trabaja fuera de casa y tiene dos hijos, se coge de vez en cuando un día de vacaciones. Su marido se va a trabajar y sus hijos al cole y ella disfruta sola. La mayoría de las veces no hace nada especial pero para ella es excepcional. Casi siempre se queda en casa, se prepara un té y lo disfruta lentamente en su sofá favorito. Disfruta así de su Día Fujitsu. Un día de calma, de reflexión, de tranquilidad y de...SILENCIO. Seguramente habrá quien piense que desperdicia parte de sus vacaciones, yo creo que hace una inversión valiosísima en sí misma. Anótatelo: el día Fujitsu.

Si estuviésemos tomando un café tendría que hablarte de un libro. Ya sabes que estoy intentando conseguir el reto #52 libros que consiste en leer 52 libros durante el año, lo que viene siendo uno a la semana. Y, como todo en esta vida, te lo voy contando en IG. La semana pasada terminé Los secretos del viejo Horace que compré por impulso en papel junto a otros cuatro libros más. No había oído hablar de él, de hecho reconozco que lo compré porque me gustó la portada. Y, sin embargo, ha pasado inmediatamente al número uno de mi ranking 2015. No es un libro de autoayuda pero hará que te sientas mucho mejor que antes de leerlo. Es un libro que te hará pensar y sacar el lápiz para subrayar muchas cosas. Es un libro en el que seguirás pensando muchos días después de leerlo. Te pongo la cita final del libro para que te hagas una idea de lo que quiero decir...

Foto de @luciababalla

Si estuviésemos tomando un café os contaría que ya estoy con la cabeza en las vacaciones. Tengo una pequeña pelea con mis chicos porque ellos quieren plan de playa y yo necesito algo más. Después de tres años viajando a Canarias en plan Todo Incluido, que no es que esté mal pero todo tiene un límite, estoy intentando convencerlos de hacer un plan alternativo. De momento el clima de las negociaciones es cordial y tengo esperanzas. Ya hemos abandonado la idea de Menorca y ahora los tengo en la cornisa cantábrica y la costa oeste de Francia. La segunda parte de la negociación incluye hacer camping para poder permitirnos estar más tiempo de viaje, pero creo que esto se lo comentaré más tarde...intentaré buscar campings con piscina para poder atraer a los más pequeños a mi terreno. Te iré informando del asunto...

Si estuviésemos tomando un café seguro que hablaríamos de vacunas. Hace semanas que este tema está presente en las conversaciones con mis amigas y, siendo yo médico, pues mucho más, claro. Antes hablábamos de la vacuna contra el menigococo B que todavía no está a la venta en España pese a las recomendaciones de la Sociedad Española de Pediatría, pero esta semana, después de la noticia del caso de difteria en nuestro país en un niño no vacunado, el tema se ha puesto calentito. Yo vacuno a mis hijos y creo que todos debemos hacerlo. Respeto las creencias de cada uno pero en vacunas no hay creencias, hay evidencias científicas. Y esas evidencias dicen que las vacunas salvan vidas y han supuesto uno de los grandes avances médicos del último siglo. He compartido en FB un artículo que explica mucho mejor que yo por qué creo que debemos vacunar a nuestros hijos y comparto aquí el enlace de nuevo. Creencias todas las del mundo, educa a tu hijo como te parezca mejor, pero la ciencia antes que nada.

Espero que hayas disfrutado del café y las galletas. Yo sigo por aquí y te espero el lunes con una receta para chuparse los dedos. Si te apetece En las nubes...