Pero desde que tengo esta cita semanal contigo reconozco que me encanta que llegue este día porque, tenga o no que trabajar, al menos paso un rato agradable comentando cómo nos fue esta semana. Así que si tienes un momento, nos sentamos y disfrutamos de nuestro café.
Esta semana ha sido genial. Pero genial de verdad. Empezábamos con nuestra escapada de fin de semana a Donosti y cualquier semana que empieza así, tiene que ir bien. Me encanta esta ciudad, me gusta todo de ella, adoro su comida, me cae genial su gente y hasta el clima nos ha tratado de maravilla las dos veces que la hemos visitado.
La disculpa para hacer esta escapada era el regalo de cumpleaños que nos hicieron mis padres a David y a mí: el menú degustación del restaurante Martín Berasategui. Un regalazo para dos apasionados de la comida como nosotros, una experiencia que nunca olvidaremos. Un trato exquisito, pendientes de todas tus necesidades pero haciéndote sentir como en casa. Y la comida...no te puedo describir con palabras lo bueno que estaba todo, desde la coca-cola que me tomé de aperitivo (que no me canso de decírselo a todo el mundo como si nunca hubiese probado antes una coca-cola, pero es que ésta con sus 7 barritas de hielo, con sus rodajitas de lima recién cortada...en fin! La coca-cola (light) más impresionante del mundo), hasta la última miguita de los bombones que acompañaron nuestro café pasando por todos y cada uno de los 14 platos del menú...Impresionante!!
Lo único malo de Donosti es lo caro que es el alojamiento. En esta ocasión decidimos ir a un hotel pero empezamos a mirar precios y finalmente optamos por una pensión, en pleno centro eso sí, pero bastante cara. La dueña amabilísima y la habitación muy limpia pero enana. Dos conclusiones: he estado en muchas ciudades con hoteles de 4 estrellas céntricos más baratos (en serio, 100 euros por noche sin desayuno!!) y la próxima vez repito con Airbnb.
Disfrutamos mucho de tiempo para nosotros dos solos pero echamos muchísimo de menos a los niños así que no nos importó volver. Total para comprobar que ellos habían disfrutado tanto como nosotros.
Esta semana te contaba cómo había sido nuestro viaje a Copenhague y revivirlo contigo hizo que volviera la morriña por mis cantábricas. Así que decidí quedar con Paula para tomarme un café pero Vero empezó entonces a decirnos que pusiéramos tres tazas y que le habláramos a una como si ella estuviese con nosotras...en fin! Que ante el temor de parecer aún más locas de lo habitual hablándole a una taza, decidimos iniciar los skypecafés. Porque es mucho más cuerdo ver a dos personas hablando a la pantalla de un móvil que a una taza de café. Dónde va a parar...Aquí entre nosotros y sin que se entere la Vero, yo pensé que iba a ser un poco rollo esto del skype pero fue genial. Volvimos a estar juntas las tres, volvimos a llorar de risa, seguimos planeando nuevos encuentros pero, de momento, nuestro siguiente skypecafé ya tiene fecha.
Y así entre cafés, entrenamientos de fútbol y un poco de trabajo se pasó mi semana. La próxima más y ojalá igual de buena. Sea como sea, si tú quieres, te espero por aquí y la comentamos...
La disculpa para hacer esta escapada era el regalo de cumpleaños que nos hicieron mis padres a David y a mí: el menú degustación del restaurante Martín Berasategui. Un regalazo para dos apasionados de la comida como nosotros, una experiencia que nunca olvidaremos. Un trato exquisito, pendientes de todas tus necesidades pero haciéndote sentir como en casa. Y la comida...no te puedo describir con palabras lo bueno que estaba todo, desde la coca-cola que me tomé de aperitivo (que no me canso de decírselo a todo el mundo como si nunca hubiese probado antes una coca-cola, pero es que ésta con sus 7 barritas de hielo, con sus rodajitas de lima recién cortada...en fin! La coca-cola (light) más impresionante del mundo), hasta la última miguita de los bombones que acompañaron nuestro café pasando por todos y cada uno de los 14 platos del menú...Impresionante!!
Lo único malo de Donosti es lo caro que es el alojamiento. En esta ocasión decidimos ir a un hotel pero empezamos a mirar precios y finalmente optamos por una pensión, en pleno centro eso sí, pero bastante cara. La dueña amabilísima y la habitación muy limpia pero enana. Dos conclusiones: he estado en muchas ciudades con hoteles de 4 estrellas céntricos más baratos (en serio, 100 euros por noche sin desayuno!!) y la próxima vez repito con Airbnb.
Disfrutamos mucho de tiempo para nosotros dos solos pero echamos muchísimo de menos a los niños así que no nos importó volver. Total para comprobar que ellos habían disfrutado tanto como nosotros.
Esta semana te contaba cómo había sido nuestro viaje a Copenhague y revivirlo contigo hizo que volviera la morriña por mis cantábricas. Así que decidí quedar con Paula para tomarme un café pero Vero empezó entonces a decirnos que pusiéramos tres tazas y que le habláramos a una como si ella estuviese con nosotras...en fin! Que ante el temor de parecer aún más locas de lo habitual hablándole a una taza, decidimos iniciar los skypecafés. Porque es mucho más cuerdo ver a dos personas hablando a la pantalla de un móvil que a una taza de café. Dónde va a parar...Aquí entre nosotros y sin que se entere la Vero, yo pensé que iba a ser un poco rollo esto del skype pero fue genial. Volvimos a estar juntas las tres, volvimos a llorar de risa, seguimos planeando nuevos encuentros pero, de momento, nuestro siguiente skypecafé ya tiene fecha.
Y así entre cafés, entrenamientos de fútbol y un poco de trabajo se pasó mi semana. La próxima más y ojalá igual de buena. Sea como sea, si tú quieres, te espero por aquí y la comentamos...
Salir de vez en cuando en pareja está muy bien, pero se echa de menos a los niños y no se puede evitar pensar en ellos casi todo el tiempo.
ResponderEliminarBEsos.
Si venís con coche para la próxima lo mejor es coger algún alojamiento rural ( en Donosti o cercanías). Calidad precio sale muchísimo mejor. Y puestos a recomendar, si ya habéis tachado Berasategi, apuntad Akelarre, Mugaritz o Arzak. Para mí, de los cuatro, el último fue el que más me gustó! Feliz fin de semana!
ResponderEliminarMonica
Donosti es genial siempre! Yo estudié allí y volvemos mucho, pero es cierto que el alojamiento siempre es carísimo, eso si encuentras. Este puente fuimos a San Juan de Luz, al ladito, y comimos un dia en Astigarraga, que no es Berasategi pero qué bueno nos supo!
ResponderEliminarBesos,